Pido perdón por anticipado, porque este post está hecho desde el prejuicio más absoluto, más cuando no me he dignado a leer aún un solo artículo de los publicados en la versión española del Huffington Post. Pero me ha llamado la atención el titular del diario El País calificando de “blogueros de calidad” a los autores que han participado en el estreno. Por el momento, éste es el panorama:
4 políticos: uno del PP (Esteban González Pons), uno del PSOE (Alfredo Pérez Rubalcaba), uno de IU (Alberto Garzón Espinosa) y uno de EQUO (Juan López de Uralde). A dicho grupo se le puede sumar Pablo Prieto, adscrito como miembro del Movimiento 15M.
3 miembros de la industria del entretenimiento: el MC El Meswy el director de cine Álex de la Iglesia y Marta Nebot (aunque ésta última es también periodista)
3 catedráticos, 1 de literatura española (Luis García Montero), 1 de economía (Emilio Ontiveros), 1 de fisiología humana (Francisco Mora)
2 relacionados con el ámbito médico: María A. Blasco Directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, y Jesús Martínez Álvarez, pediatra.
1 escritor, Eduardo Verdú
Todo ello dirigido por Montserrat Domínguez, reconocida periodista y comunicadora, con el consentimiento de Arianna Huffington (la que da nombre a la publicación y que originó ese formato torticero que venden como “una nueva forma de entender el periodismo y la comunicación”), y Juan Luis Cebrián, el mecenas (vía El País) de esta iniciativa.
¿Cuántos de todos los anteriores son blogueros reputados? Pues no muchos de ellos, más cuando la gran mayoría ni siquiera saben que es eso de dinamizar un blog. Alberto Garzón y López de Uralde poseen su propio blog personal (aquí y aquí). En cambio, Esteban González Pons y Rubalcaba no se han mostrado tan activos como los anteriores, aunque sí es cierto que el primero ha participado en algunos momentos activamente con secciones propias en otros tantos periódicos, a la vez que publica en la blogosfera del PP. Sobre Pablo Prieto no he podido encontrar nada previo, aunque quizá sea debido a que no he sabido buscar en la red. De todos ellos, el de Alberto Garzón es el blog que disfruta de una mayor fama.
Respecto a los miembros de la industria del entretenimiento, Marta Nebot ya participó anteriormente en el diario Público,pero tampoco se puede hablar de su columna como el espacio estrella de ese diario. Sobre el fundador (fe de erratas: el fundador es Frank-T) miembro del Club de los Poetas Violentos poco más se puede decir aparte de que es un excelente MC, pero lo que es publicar en la red, poco. Álex de la Iglesia es un tipo que cae bien. Y de vez en cuando, cuando ha escrito algo, ha aportado cosas interesantes.
Ontiveros es un contrastado articulista de prestigio, pero no un blogger (que, al caso, no creo que sea un problema). Luis García Montero ha perdido fuelle últimamente en su blog personal, pero experiencia no le falta y hubo meses donde llegó a publicar hasta 44 posts (a más de un gol por partido como dirían los futbólogos). Francisco Mora tampoco ha dinamizado nunca un blog, por lo que está por ver.
En el colectivo de medicina, Jesús Martínez Álvarez, que ya se reconoce como bloguero en la misma web, dinamiza uno de los espacios sobre pediatría en español con más éxito, por lo que sí deberíamos su experiencia más que sobrada, y su éxito descarado.
¿Se puede hablar de blogueros de calidad? Por lo menos por ahora no (exceptuando, claro está, alguno de los anteriores casos). No tanto por el sobrado conocimiento que pueden tener muchos de ellos en su campo, sino por la falta de experiencia que en el ámbito bloguero poseen la mayoría de ellos. Un ejemplo claro de esa inexperiencia: el uso de enlaces externos, o mejor dicho la total ausencia de ellos. En el post de Rubalcaba no hay ninguno. Tampoco en el de González Pons. Ni en el de Luis García Montero. Y en el de la propia directora, un enlace ¡al Huffington Post!
El link es una de herramienta fundamental que cualquier bloguero está obligado a utilizar. Su riqueza no se caracteriza solo por el contenido de los posts, sino por las fuentes externas que ofrece. Y la acción del usuario en la red ya dice mucho de su pretensión: navegar. Ir de un espacio a otro, saltar de enlace a enlace, y si le ha gustado lo que le muestra el bloguero, vuelve a la fuente original en busca de más aportaciones de interés. Si ya para empezar se olvidan de esa base, van por mal camino.
Tampoco parece muy enriquecedor apostar por tener en la nómina de blogueros a 4 personas vinculadas a partidos políticos de los 14 presentados hasta ahora. La proporción políticos per cápita no es tan alta en España como para que la nómina del Huffington Post requiera ser tan elevada. Y tampoco creo que ello se pueda vender como un medio de comunicación plural. En todo caso, le da un elemento de folklore.
Más cosas. Parece que buen ambiente en el Huffington Post no falta. Fruto de ello, prometen titulares al nivel de la Cuore. Hoy se han lucido: “GOBERNADOR AL RESCATE”, ETA, sin un duro, Alemania: Jugar, beber y fumar, ¿Qué hay dentro del Pirulí?,A ‘ultraderechazo’ limpio,«Mis tetas son mi mejor arma»…
Y lo mejor, esa portada tan molona con la que han abierto la edición de hoy. Para hacer eso es imprescindible trabajar con un Mac.