Vaya por delante que Booquo, la plataforma digital de libros y películas basada en la nube y recientemente inaugurada por Círculo de Lectores, me parece una excelente iniciativa que asegura que este longevo club de lectura permanezca en nuestros hogares durante unos cuantos años más (aunque cada vez ocupará menos espacio en nuestras estanterías).
- Acceso a la biblioteca de Booquo (a día de hoy dispone de unos 300 títulos, que pretenden ampliar a 1.000) sin límites.
- Acceso a una novedad al mes de cualquiera de los canales temáticos de los que dispone, a saber: Ciencia, Historia y engimas, Crimen, Ficciones, De Lletres. ¿Qué es un canal temático? “Son espacios dedicados a tus temáticas favoritas: ciencia, novela negra, narrativa, empresa, etc. En cada canal tendrás una selección de grandes novedades de eBooks, contenidos adicionales sobre la temática, una revista digital especializada y contacto directo con autores.”
- Puedes leer los libros en cualquier dispositivo a través de cuenta, tanto online como offline.
Como con los restaurantes de buffet libre, siempre habrá el típico hambriento (o abusón) que devorará trescientos ebooks en un mes, pero este viene siendo más la excepción que la regla.
Ofrecer total libertad para disponer del catálogo de Booquo al gusto del autor habría sido sin duda la alternativa más razonable, y incluso la más coherente cuando se busca conertirse en una verdadera comunidad digital de lectura. Otra comparación odiosa con Spotify: por el mismo precio que Booquo, tienes acceso a toda la música de la que disponen, novedades o no, sin limitación alguna de tiempo. Que ofrezcan todo su catálogo sin excepciones no implica que el usuario vaya a consumir todo de lo que dispone. Simplemente, acaba seleccionando y escuchando aquello que realmente le gusta o le interesa, por lo que dicha libertad al fin y al cabo no implica un mayor o menor consumo. Así mismo, no tengo ninguna duda de que la cantidad de usuarios que accederían al servicio con esta oferta también se vería incrementada, y si realmente creen que este tipo de servicios son el futuro de la industria cultural, bien vale la pena armarse de un buen número de fieles premium.
Una forma de subsanar el error y comprobar que realmente es más efectiva esta opción sería ofrecer dos tipos de servicios premium: uno tal como lo ofrecen, y otro con el catálogo completo. De todos modos, seamos realistas: está claro que las editoriales siguen siendo reticentes a “regalar” libros, y probablemente Booquo se haya encontrado con muchas objeciones por parte de estas para poder llevar a cabo un proyecto viable y promover un catálogo interesante. Luchar por convencer a estas de que la amplitud en la disponibilidad de libros es lo que hará crecer a la comunidad será la tarea pendiente que influirá en el éxito o fracaso de dicha iniciativa.
P.D 1: En un próximo post os contaré mi aventura con el servicio premium de Booquo (sí…pagaré esos 0,99 Euros que me piden…)
P.D 2: Como creo que Booquo merece tener derecho de replica, he enviado el artículo a la dirección de Círculo de Lectores. Si hay novedades, las publicaré próximamente.