«Del mismo modo, entre el mismo colectivo policial es necesario un reconocimiento de la existencia del problema [del suicidio]. Esconder las vulnerabilidades en una aparente dureza de caracter no aplaca el problema, al contrario, aumenta el riesgo. El primer paso para una reducción en dicha problemática estriba en el apoyo del mismo colectivo policial hacia aquellos compañeros que necesiten ayuda en un momento concreto. Naturalizar la situación como algo propio del trabajo del agente, pero que a la vez debe recibir un tratamiento. Solo desde esas directrices se podrá reducir el impacto negativo que el suicidio tiene en el entorno policial.»
Oscuro
Claro