Cuando empezamos a andar con Criminología y Justicia, me parecía que llegar al año de vida sería de un mérito enorme si lo conseguíamos. Ahora que ya hemos cumplido nuestro objetivo, y viendo que no nos faltan ganas, queremos más. En la Editorial de la web os he dejado una crónica de las primeras horas de vida de esa publicación de la que estoy tan orgulloso de formar parte. Un fragmento:
Los días previos había dos cuestiones que me inquietaban bastante: ¿Y si llega un momento en que ya no tenemos nada que decir? y ¿Y si ignoran por completo nuestra existencia entre los millones de páginas web?. Los dos mayores miedos eran que nuestra dinámica no fuera lo suficientemente fuerte como para contribuir diariamente a la reflexión personal en materia de criminalidad. Un año después, los resultados quedan a la vista: exceptuando momentos concretos en los que otras labores nos han impedido a todos los colaboradores implicarnos igual en nuestro proyecto, siempre hemos estado ahí con algo que decir. La segunda cuestión se ha olvidado por completo gracias a la interacción con muchos lectores, que habéis mostrado tanto críticas positivas como negativas sobre los artículos que hemos ido colgando. Lo importante es que no dejamos indiferentes. Sabemos también que hay, aunque no se muestren tan participativos, un importante grupo de lectores que nos siguen fielmente cada día.