Oscuro Claro

Hace ahora dos meses publicaba en un post mi malestar con la Asociación Praxis Vega Baja por cierta publicación en su página de Facebook que resultó ser un copia-pega de un artículo mío publicado en Criminología y Justicia, sin contar con la correspondiente citación. Al darme cuenta, se lo hice saber a través de un comentario en el mismo post, que fue posteriormente eliminado por el administrador de dicha página.

A raíz de eso, quise denunciar públicamente tanto la eliminación del comentario como el hecho de que no se me pidiera disculpas por ello. Si bien sigo pensando que la reacción por su parte no fue la mejor, no tengo duda alguna que la mía fue desmesurada, y que cometí el error de ser demasiado agresivo con algo que en realidad había sido realizado con buena voluntad por parte de dicha asociación.

Me explico. Creo que mi error estribó en darle más importancia al hecho de que no se mencionaba mi autoría, antes que el hecho de que se estaba dando a conocer un tema que me parecía relevante. Vamos, que con mi reacción acababa de situar mi ego por encima del contenido y de la difusión del conocimiento. Por mucha licencia que hubiera de por medio, hubiera sido mucho más correcto agradecer la difusión de ese contenido, y en todo caso mencionar que si era posible incluir la autoría. Pero no fue de recibo la actitud a la defensiva por mi parte, agravada por el hecho de que eliminaran mi comentario y que me hizo tomármelo como algo personal. Pues mal hecho, ese arrebato estuvo totalmente fuera de lugar.

Que alguien copie tu contenido, sea citándote o no, es señal de que se le da un valor. Y esto último, y no el reconocimiento al autor, es lo que en realidad debe prevalecer.

Así que por mi parte, este post sirva como petición pública de disculpas a la Asociación Praxis Vega Baja por mi actitud. Lo siento, me he equivocado y (espero) no lo volveré a hacer.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Post Relacionados
Suscríbete ahora y recibe el ebook Nadie Debería Trabajar Jamás gratis
¡Lo quiero!
Total
0
Share