Oscuro Claro

Hace ahora poco más de dos años denunciaba en un post la escasa oferta de libros digitales de criminología que había en la tienda Kindle de Amazon, mayoritariamente publicados por Biblioteca del Crimen y Criminología y Justicia. Eran apenas 109 los resultados que desprendía el buscador cuando tecleabas la palabra clave “criminología”.

Siguiendo exactamente el mismo proceso, he vuelto a hacer una revisión de los resultados que desprendía la tienda Kindle en lo que a libros digitales de criminología se refiere. En un principio estos podrían resultar mucho más alentadores que en la última ocasión: 209 libros encontrados, practicamente el doble que hace dos años.

Sin embargo, sigue siendo un resultado algo engañoso, ya que de esos 209 libros, tan solo 66 están en castellano, y los 143 restantes están en portugués o en italiano. No debería suponer mayores problemas leer en las lenguas portuguesa y italiana, pero lo que quiero dar a entender es que la criminología hispana tiene muy poca presencia en Amazon. Si a eso le sumamos que de los 66 libros disponibles en la tienda Kindle están repartidos entre unos pocos (Jose Manuel Ferro Veiga copa la categoría con 11 libros publicados, Cristina Amanda Tur le sigue con 6, Wael Hikal con 5 y Vicente Garrido con 4, entre las que se encuentran las aclamadas obras Martyrium y Crímenes Exquisitos publicadas junto a Nieves Abarca con un precio muy accesible) y que más de una cuarta parte de los libros los hemos publicado a través de Criminología y Justicia, el panorama sigue siendo bastante desalentador. Si bien debemos entender que este escaso catálogo viene influido en gran parte por la reticencia de las grandes editoriales al mundo del libro digital, es cuanto menos preocupante la cuasi ausencia de catálogo disponible.

Afortunadamente, ese catálogo resulta infinitamente más amplio cuando buscamos por la palabra clave: “criminology”, con más de 6.000 resultados. Del mismo modo, debemos tener también en cuenta que hay publicaciones disponibles en Kindle que se podrían considerar como criminológicas pero que no se encuentran utilizando la palabra clave “criminología”.

Sea como fuere, dos años después, mal que nos pese, en la tienda Kindle sigue habiendo poco donde elegir.

Fotografía de Bruno Hautzenberger
Fotografía de Bruno Hautzenberger

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