Toquemos todos a esa rana

Cada vez que escucho Raconte-Moi Une Histoire, una canción de M83, consigue que de manera casi automática mi humor cambie de forma repentina a un estado de ánimo tan positivo que a veces llega a sorprenderme, así que me dispuse a indagar un poco sobre el significado de la letra, y las razones por las que era capaz de provocar una sensación tan plena en unos pocos minutos.
La canción cuenta una historia sobre una rana que, si la tocas, es capaz de cambiar radicalmente la percepción del mundo, y tu estado de ánimo. Si interpretamos la canción en sentido literal no es descabellado pensar que se trataría de la descripción del mundo producida bajo los efectos de un alucinógeno muy potente. En algunos foros hablan de la Dimetriltiptamina (DMT), que se puede encontrar en algunas plantas y animales, y que según versiones de aquellos que la han probado, produce muchos de los efectos que se mencionan en la canción: la sensación de que lo uno es lo otro (And blue becomes red and red becomes blue,And your mommy suddenly becomes your daddy), de estar viajando a otros lugares (You can dive into the water, And cross the rivers and the oceans, And you can jump all the time and everywhere), e incluso la intensidad emocional de todo lo que se percibe (y que en la canción se traduce en forma de una niña que narra la historia).
Pero más allá del sentido científico que puede tener la canción, con o sin alucinógenos, si algo es capaz de conseguir es expresar de forma brillante y lúcida el poder y la capacidad inspiradora de la imaginación. Porque la imaginación es el primer paso para la construcción de un mundo diferente. La imaginación es la antesala de la creatividad, de la innovación, del entusiasmo, de tantos otros valores que pueden marcar una forma de entender y afrontar la vida. Podría tratarse incluso de una actitud propia del resiliente, capaz de afrontar con una fuerza inabarcable los dramas personales y sociales que le rodean. También podría tomarse como la cosmovisión del ignorante o falto de conciencia para con la desgracia humana, que día sí, día también, nos recuerda que el ser humano ha nacido para convivir con la tragedia.
Independientemente de la cosmovisión que tengamos, creo que es la única actitud que podría no llevar a la autodestrucción del ser humano. El progreso de la técnica que hemos alcanzado nunca hubiera sido posible sin que una persona, o un grupo de personas, o una sociedad al completo, en un momento dado, no se hubiera imaginado en un mundo saltando por las calles, o de edifico en edificio, o por los diferentes planetas (Jumping into the streets, Jumping into the planet, Climbing up the buildings). La inmediatez de los acontecimientos que vivimos nos impide en la mayoría de ocasiones realizar un verdadero cálculo de costes-beneficios sobre el futuro que nos imaginamos. Sin embargo, hemos de tomar el precepto Leibniziano de que es éste el “mejor de los mundos posibles” y no nos queda otra que desplegar nuestra imaginación sin tiempo para pensar en ello. El mismo título del disco en el que se incluye la canción mencionada creo que define la actitud que deberíamos tomar para inspirarnos en lo que debemos hacer con nuestras vidas: “Hurry up, We’re Dreaming”

We can be a whole group of friends
A whole group of frogs
Jumping into the streets
Jumping into the planet
Climbing up the buildings
Swimming in the lakes and in the bathtubs
We would be hundreds, thousands, millions
The biggest group of friends the world has ever seen
Jumping and laughing forever
It would be great, right?