Oscuro Claro

Uno de los grandes problemas dentro de las empresas es el absentismo laboral. No poder contar con la mano de obra de un trabajador equivale a una pérdida de valor de la empresa, y obliga a reajustar su modelo de trabajo. Este absentismo, como hemos visto en otros posts, viene provocado en ocasiones por los propios déficits de la organización, como la sobrecarga laboral. Sin embargo, en otras tantas obedece a factores que no necesariamente tienen relación con la empresa. Hay que asumir entonces que es algo que debe afrontar toda empresa, pero hay diferentes formas de reducir ese absentismo y no provocar recaídas en los empleados. Partiendo de esa base Durand, M., Corbière, M., Coutu, M., Reinharz, D. y Albert, V. publicaron el pasado año un estudio de revisión de diferentes protocolos y estudios donde se analizaban las recomendaciones en común existentes a la hora de llevar a cabo una correcta integración del empleado tras un periodo de baja laboral. Se resumió en 6 directrices dirigidas a todas las empresas:

1. Respeta el periodo de recuperación y ofrece soporte extra

Aunque resulte una obviedad, es fundamental que la empresa respete el periodo de recuperación estimado, siguiendo las prescripciones médicas correspondientes. Eso implica que ni el empresario debe presionar por la vuelta del empleado, ni debe permitir que el empleado vuelva antes de tiempo aunque éste considere estar en condiciones, pues ello puede dar lugar a que se den nuevas bajas del empleado a medio-largo plazo. Además de conceder la baja al empleado, las empresas que sean capaces de conceder servicios especializados para encaminar una mejor recuperación del trabajador facilitarán una óptima vuelta al trabajo. Se trata de una inversión que queda recuperada en tanto el absentismo se ve reducido gracias a ese apoyo.

2. Manten la comunicación con el empleado durante el periodo de baja

Es interesante que durante el periodo de recuperación se mantenga contacto directo con el empleado por vía telefónica de cara a continuar manteniendo el vínculo con la empresa. Esas comunicaciones no deben utilizarse para presionar al trabajador en su retorno, sino simplemente para que éste perciba la existencia de apoyo durante su ausencia, que sepa que no se olvidan de él. Dado que según las circunstancias esta comunicación puede generar rechazo por parte del trabajador, en ocasiones se recomienda que estas comunicaciones se lleven a cabo a través de un agente externo que se mantenga en una posición neutral entre trabajador y empresa.Dado que no todas las personas tienen la misma necesidad de atención de los demás, es recomendable que sea el propio empleado el que manifieste cada cuanto le gustaría que se comunicaran con el durante su ausencia laboral. Estas comunicaciones sirven además para ir teniendo información sobre el proceso de recuperación del empleado, y que servirá para evaluar cuál debe ser el moejor modo de volver al trabajo.

3. Evalua en qué condiciones debe volver al trabajo

giphy (3)

Cuando el empleado se encuentre en condiciones de volver es el momento de realizar una evaluación de las tareas que deberá realizar una vez vuelva, y el modo en qué deberá llevarlas a cabo. Para ello se tendrá en cuenta la opinión del trabajador a la hora de valorar cuáles son los aspectos laborales que pueden resultar más problemáticos en su vuelta a la faena. Dependiendo de la causa de la baja estos factores pueden ser clínicos (Ej: evitar realizar ciertas actividades físicas que vuelvan a reproducir el dolor por el que ha sido baja), social (Ej: necesidad de recibir más apoyo del resto de compañeros) o organizativas (Ej: sobrecargas de trabajo que pueden reproducir episodios de estrés laboral).La clave es: identificar los problemas que han provocado la baja o que puden reproducirla, y ser capaces de ofrecer soluciones potenciales.

4. En la flexibilidad está la clave

Cuanto más largo ha sido el periodo de baja, más hay que tener presente que no se puede forzar la vuelta a la normalidad desde el primer día de su vuelta. Es como si a un futbolista que ha tenido que superar una dura lesión se le empezara a poner de titular desde que se comunica el alta médica. La precipitación puede provocar al final un mayor perjuicio, y se elabora un plan en el que se le van dando minutos de forma progresiva. También en el fútbol, sobretodo cuando se trata de figuras clave en un equipo, vemos cómo ese error se comete en ocasiones, provocando una recaída del jugador en cuestión con las consiguientes consecuencias en su rendimiento. Es importante entonces tener en cuenta que el retorno debe ser progresivo y en las mejores condiciones posibles, ofreciendo un apoyo mayor que al resto de empleados.

5. Consigue el apoyo del resto de empleados

Hay que tener en cuenta que dar cierto trato de favor al empleado que vuelve tras una baja laboral puede ser problemático si el resto de compañeros no son capaces de entender la situación de esa persona, sobretodo cuando la causa de la baja ha obedecido a cuestiones menos tangibles como en el caso de las depresiones. El coordinador de los empleados debe ser capaz de conseguir que éstos lo arropen y comprendan que se trata de una situación especial que favorece a todos a largo plazo, y dar a entender que es el trato que recibirían en caso de encontrarse en su lugar. Se les debe anticipar la planificación que se llevará a cabo y expresar las razones por las que se lleva a cabo. Toda la información que posibilite una mejor comprensión del resto de compañeros hará más sencilla la reintegración.

6. Haz un seguimiento de su vuelta al trabajo

Una vez realizada la planificación es el momento de que el empleado vuelva al tajo. A partir de ese momento, el responsable o responsables del empleado deberán hacer un seguimiento y mantener una comunicación constante sobre la evolución que va siguiendo, y los problemas que se puede ir encontrando. Eso implica que el plan trazado puede variar en función de la evolución, y los reajustes son en ese proceso algo habitual. Poco a poco, y a medida que el empleado se va integrando sin mayor problema, se podrá ir normalizando su situación de cara a que el empleado pueda volver a dar el mejor rendimiento de sí mismo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Post Relacionados
Suscríbete ahora y recibe el ebook Nadie Debería Trabajar Jamás gratis
¡Lo quiero!
Total
0
Share